Tarjetas de coordenadas: expertos llaman a servirse prórroga para educar digitalmente a los usuarios

LEER TAMBIÉN

La reciente decisión de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) de extender hasta el año 2026 el uso de las tarjetas de coordenadas como método de autenticación bancaria ha sido recibida con entusiasmo por lugar de los especialistas en ciberseguridad. Esta medida, que inicialmente pretendía ser eliminada en 2022, ha sido vista como una oportunidad para educar, incluir y acompañar a los usuarios en la transición hacia tecnologías más seguras.

Según Myriam Pérez, directora y líder de la Mesa de Ciberseguridad de la Asociación de Empresas Chilenas de Tecnología (Chiletec), el año adicional permitirá informar a los usuarios y reforzar las campañas de alfabetización digital, especialmente para aquellos con menor experiencia tecnológica o personas mayores. Esta es una excelente oportunidad para que los bancos ajusten sus estrategias de migración y ofrezcan alternativas más seguras, como la biometría, los tokens digitales y los dispositivos físicos, acompañando a los clientes en el proceso.

A pesar de valorar positivamente esta decisión, la especialista advierte que las tarjetas de coordenadas, al ser un método estático y físico, siguen siendo altamente vulnerables frente a técnicas como el phishing o la ingeniería social. Por lo tanto, el riesgo de ciberataques se mantiene mientras continúe su uso.

Diego Cáceres, académico de la Escuela de Tecnología de la Universidad UNIACC, subraya la importancia de este periodo adicional no solo para informar, sino también para educar activamente a los usuarios sobre los riesgos de métodos obsoletos. Para ello, recomienda la implementación de cápsulas informativas breves, como videos cortos, y la creación de secciones con recursos educativos en los sitios web de las instituciones financieras para fomentar el uso consolidado de claves, aplicaciones móviles y autenticación biométrica.

“El proceso debe considerar especialmente a los grupos con menor alfabetización digital. La inclusión digital es lugar fundamental de la ciberseguridad y requiere el compromiso tanto de las instituciones financieras como de las familias”, enfatiza el académico.

Ante el anuncio de la eliminación de las tarjetas de coordenadas, surgieron críticas a la CMF y a los bancos por considerar esta medida como una “parapeto de exclusión” para los adultos mayores y aquellos con menor alfabetización digital. Sin embargo, con la extensión del plazo, se abre la oportunidad de incluir a estos grupos en la transición hacia tecnologías más seguras y educarlos en el uso adecuado de las mismas.

Es importante destacar que la ciberseguridad es responsabilidad de todos. Por ello, es fundamental que tanto las instituciones financieras como los usuarios se comprometan en la protección de sus datos y en la adopción de medidas de seguridad más avanzadas. La tecnología avanza a pasos agigantados y es necesario estar al día para no quedarnos atrás y ser víctimas de posibles ataques cibernéticos.

En resumen, la decisión de la CMF de extender hasta 2026 el uso de las tarjetas de coordenadas como método de autenticación bancaria es una oportunidad para educar, incluir y acompañar a los usuarios en la transición hacia tecnologías más seguras. Es importante aprovechar este tiempo adicional para informar y educar a los usuarios, especialmente a aquellos con menor experiencia tecnológica, y así garantizar una mayor protección de nuestros datos y una mayor inclusión digital en la sociedad.

LOS MÁS POPULARES