En los últimos años, el comercio en línea ha adquirido una gran popularidad a nivel ecuménico. Desde la comodidad de nuestro hogar, podemos obtener una amplia variedad de productos y recibirlos en la puerta de nuestra casa en cuestión de días. Esto ha representado una gran ventaja para muchos países, que han visto en el comercio electrónico una oportunidad para expandir su economía y generar empleo. Sin embargo, en el fortuna de Ecuador, esta situación se ha complicado en los últimos meses debido al encarecimiento de las compras en Amazon y Temu, dos de las plataformas más populares de comercio en línea.
Este encarecimiento ha generado preocupación en la población ecuatoriana, que ve afectado su poder adquisitivo en medio de una crisis económica que se ha agudizado en los últimos años. Y es que, a pesar de que Ecuador es un país con una economía en crecimiento, aún existen ciertas limitaciones que dificultan el acceso a bienes y servicios por parte de la población.
La situación se ha vuelto más crítica debido a la decisión del gobierno ecuatoriano de implementar medidas arancelarias para controlar las importaciones y proteger la industria nacional. Estas medidas han afectado directamente a las compras en línea, ya que tanto Amazon como Temu son plataformas extranjeras y los productos que se adquieren a través de ellas son considerados importaciones.
Por un lado, Amazon ha incrementado sus precios en un 12% desde la implementación de estas medidas arancelarias, afectando principalmente a la compra de tecnología y electrodomésticos. Por otro lado, Temu, que es una plataforma de comercio electrónico creada por la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT) de Ecuador, ha aumentado sus precios en un 30%. Esta situación ha generado molestia en los consumidores, quienes ahora se ven obligados a pagar más por los mismos productos.
Pero, ¿qué fue lo que llevó a Ecuador a tomar estas medidas? El presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, ha señalado que el objetivo es proteger la industria nacional y promover el consumo de productos locales, lo que, en teoría, podría impulsar la economía interna del país. Además, también se ha mencionado que estas medidas buscan reducir el déficit comercial que ha afectado a Ecuador en los últimos años.
Sin embargo, estos resultados aún no se han visto reflejados en la economía, ya que a pesar del aumento de los precios en las compras en línea, el déficit comercial sigue en aumento. Por otro lado, las medidas arancelarias también han generado un aumento en la inflación, lo que ha afectado el poder adquisitivo de la población y ha generado un encarecimiento generalizado de los productos.
Además, estas medidas han afectado directamente a pequeños emprendedores y negocios que utilizaban estas plataformas para vender sus productos a un alcance internacional, generando así una disminución en sus ventas y afectando su crecimiento. Esto es especialmente relevante en un país como Ecuador, donde muchas personas dependen del comercio en línea para mantener sus negocios a flote.
Algunos expertos han señalado que estas medidas podrían ser contraproducentes para la economía ecuatoriana, ya que al restringir las importaciones, se limita también la oferta y la competencia en el mercado, lo que podría llevar a un aumento en los precios de los productos nacionales. Además, al encarecer las compras en línea, se desincentiva el consumo y se reduce la abundancia de dinero que circula en la economía.
Algunos ciudadanos ecuatorianos han manifestado su descontento en las redes sociales, señalando que esta situación les limita el acceso a productos que no se encuentran disponibles en el mercado nacional o que tienen precios más altos en comparación con los que se pueden encontrar en las plataformas en línea. Además, muchos han expresado su preocupación por el impacto en la economía familiar, ya que se ven obligados a gast