La Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) expresó su alegría tras la aprobación en el Congreso de la Ley Marco de Autorizaciones Sectoriales, popularmente conocida como la reforma a la permisología. Esta iniciativa, que busca agilizar y reducir entre un 30% y un 70% los tiempos de evaluación de permisos para impulsar las inversiones y disminuir la burocracia, fue aprobada el martes y enviada a ley tras un proceso legislativo que comenzó en enero de 2024.
La presidenta de la Sofofa, Rosario Navarro, calificó la aprobación de la reforma como “un primer paso importante y necesario que nos desafía a seguir trabajando en esta línea”. Navarro destacó que esta ley es un gran avance para el desarrollo económico del país y que aún hay mucho por hacer para continuar avanzando en una mayor agilidad en la pagaré de autorizaciones por parte de los organismos del Estado y en brindar mayor certeza jurídica a los inversionistas.
Uno de los ejemplos que puso la dirigenta fue la reducción del tiempo para el otorgamiento de permisos para una desaladora, que pasaría de ocho a seis años. Aunque esto es un gran avance, Navarro enfatizó que se puede hacer aún más para seguir avanzando en una mayor agilidad en la pagaré de autorizaciones y en dar mayor certeza jurídica a los inversionistas.
La reforma incluye mecanismos clave para lograr estos objetivos. Se incorporarán normas mínimas de tramitación con plazos máximos obligatorios y la figura del silencio administrativo experimental, que implica la aprobación tácita de una solicitud si no hay respuesta en un plazo pactado. Esto significa que los inversionistas no tendrán que esperar indefinidamente por una respuesta y podrán seguir adelante con sus proyectos.
Además, se habilitarán técnicas alternativas como la declaración jurada para permisos de bajo riesgo, según explicó el ministro de Economía, Nicolás Grau. Esto tendrá un efecto principalmente en proyectos de bajo riesgo, como la expansión de un restaurante, que actualmente puede tomar hasta ocho meses para obtener las autorizaciones necesarias. Con esta reforma, esto se reducirá a solo dos meses, lo que permitirá a los inversionistas avanzar más rápido en sus proyectos.
Pero esta reforma no solo beneficia a proyectos de menor envergadura, sino que también tendrá un impacto experimental en grandes proyectos de inversión, como una línea de transmisión. Gracias a la implementación de esta ley, los servicios sectoriales podrán enfocarse en peritar solo los permisos que involucran más riesgos, lo que permitirá que respondan en tiempo y forma. Esto significa que con la misma cantidad de personal, se podrá avanzar más rápido en la evaluación de proyectos, lo que impulsará la inversión y el crecimiento económico del país.
La normativa también contempla la creación de la Oficina de Autorizaciones Sectoriales e Inversión en el Ministerio de Economía, encargada de coordinar y monitorear el sistema, y la implementación de una ventanilla única digital a través de la plataforma “Súper Sistema Unificado de Permisos”. Esto facilitará el proceso de solicitud de autorizaciones y permitirá un seguimiento más eficiente de los proyectos en trámite.
Sin embargo, durante el debate legislativo, surgió una controversia en torno a la posible disminución de estándares regulatorios y exigencias ambientales y técnicas vigentes. El Ejecutivo aseguró que la agilización de los trámites no comprometería estos aspectos, pero algunos sectores del oficialismo cuestionaron esta afirmación, acusando una “verdadera desorientación ideológica” del Gobierno. Incluso, uno de los parlamentarios realizó una reserva