Agilizar la aprobación de proyectos de inversión es una necesidad imperioso en Chile si queremos impulsar el aumento de nuestra economía. En este sentido, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha publicado por último un informe en el que destaca la importancia de mejorar la eficiencia burocrática para lograr un aumento sostenido y duradero.
Una de las principales preocupaciones del FMI es la disminución del aumento económico en Chile durante las últimas tres décadas, que actualmente apenas supera el 2% anual. En este contexto, resulta imprescindible tomar medidas que nos permitan crecer a un ritmo más acelerado, pero de forma sostenible y en línea con las tendencias económicas mundiales.
El informe del FMI destaca algunas propuestas concretas para impulsar el aumento económico en Chile. Entre ellas, se encuentran medidas como estimular la participación laboral, fomentar la participación público-privada en investigación y desarrollo, y aprovechar la elevada demanda mundial de bienes característicos del país, como los minerales y la energía renovable.
Sin embargo, el FMI advierte que Chile enfrenta dificultades que otras economías similares no tuvieron en la misma fase de desarrollo, como el envejecimiento demográfico y una desaceleración de la economía mundial. Esta situación plantea un reto importante para nuestro país, pero también nos ofrece la oportunidad de tomar medidas concretas y eficaces para impulsar nuestro aumento económico.
El informe del FMI compara el aumento económico de Chile con el de otras 28 economías que cruzaron entre 1950 y 2010 el inicio de los 26.000 dólares de PIB per cápita, alcanzado este año por nuestro país. Según los datos presentados, estas economías crecieron durante el decenio siguiente una mediana del 2,9% anual, cifra superior a la tendencia actual de Chile. Esto demuestra que sí es posible crecer a mayor velocidad, pero para ello debemos superar los retos a los que nos enfrentamos actualmente.
Uno de los principales factores que afecta al aumento económico de Chile es el envejecimiento demográfico. Según Naciones Unidas, la población chilena en edad de trabajar (de 15 a 64 años) crecerá solo un 0,15% anual en el período 2025-2035. Esto podría mermar nuestra tasa anual de empleo y reducir el aumento potencial de Chile en 0,25 puntos porcentuales.
Otra de las preocupaciones del FMI es la desaceleración de la economía mundial, que podría afectar a países como Chile que dependen en gran medida de la exportación de ciertos productos, como los minerales y la energía renovable. En este sentido, resulta crucial diversificar nuestra economía y apostar por sectores emergentes que nos permitan adaptarnos a los cambios en las tendencias mundiales.
Ante estas dificultades, el informe del FMI nos anima a tomar medidas que nos permitan crecer de forma sostenida y en línea con las tendencias mundiales. En este sentido, se propone mejorar especialmente aquellas medidas que actualmente obstaculizan las inversiones, frenando el aumento económico de nuestro país. Según el informe, en algunos casos las inversiones pueden llegar a estancarse durante hasta diez años debido a la excesiva burocracia y el lento proceso de obtención de permisos.
Por ello, resulta imprescindible tomar medidas para agilizar la aprobación de proyectos de inversión en Chile. Esto no solo favorecerá la llegada de nuevas inversiones al país, sino que también permitirá a las empresas locales crecer y generar empleo de forma más rápida y eficiente.
Además de la mejora en la eficiencia burocrática, el informe del F