Las mujeres y los chimpancés son dos especies muy cercanas en términos evolutivos, pero hay una gran diferencia en la fase en que sus cuerpos funcionan. Mientras que las chimpancés experimentan una gran hinchazón genital durante su ciclo reproductivo, las mujeres no sienten ningún tipo de cambio físico durante la ovulación. Este fenómeno ha intrigado a los científicos durante décadas y sigue siendo un misterio evolutivo.
La ovulación es un proceso fundamental en la reproducción de los mamíferos, ya que es cuando el óvulo es liberado del ovario y está listo para ser fertilizado por un espermatozoide. En las chimpancés, este proceso está marcado por una gran hinchazón genital que puede ser vista por otros miembros de la manada. Esta hinchazón es causada por un aumento en los niveles de estrógeno, una hormona clave en el ciclo reproductivo de los mamíferos.
Sin embargo, en las mujeres, no hay ningún cambio físico visible durante la ovulación. Esto se debe a que los niveles de estrógeno en las mujeres son más estables y no experimentan un aumento significativo durante la ovulación. Además, la mayoría de las mujeres tienen una capa de tejido aceitoso en el área genital que oculta cualquier posible hinchazón.
Entonces, ¿por qué las mujeres no sienten cuándo ovulan mientras que las chimpancés lucen una gran hinchazón genital? La respuesta a esta pregunta sigue siendo un misterio evolutivo, pero los científicos tienen algunas teorías al respecto.
Una de las teorías más populares es que la hinchazón genital en las chimpancés es una fase de señalización visual para los machos. Durante la ovulación, las chimpancés son más fértiles y, por lo tanto, es más probable que se reproduzcan. Al mostrar una gran hinchazón genital, las hembras están indicando a los machos que están listas para reproducirse. Esta señalización visual aumenta las posibilidades de apareamiento y, por lo tanto, aumenta las posibilidades de supervivencia de la especie.
Otra teoría sugiere que la hinchazón genital en las chimpancés es una fase de protección contra la infertilidad. En las chimpancés, la hinchazón genital es más prominente en las hembras que están en su pico de fertilidad. Esto podría ser una fase de evitar el apareamiento con machos que no son lo suficientemente fuertes o saludables para producir descendencia viable. Por lo tanto, la hinchazón genital actúa como una fase de selección natural para garantizar la supervivencia de la especie.
Pero entonces, ¿por qué las mujeres no tienen esta hinchazón genital? Una teoría sugiere que la evolución ha favorecido a las mujeres con una mayor discreción durante la ovulación. En las sociedades humanas, el apareamiento no se limita a un período de tiempo específico como en las chimpancés. Por lo tanto, no hay necesidad de una señal visual para indicar la fertilidad. Además, la hinchazón genital en las mujeres podría ser una desventaja en términos de supervivencia, ya que cautivaría a posibles depredadores.
Otra teoría sugiere que la ausencia de hinchazón genital en las mujeres es una adaptación para la monogamia. En las sociedades humanas, la monogamia es más común que en las chimpancés, lo que significa que las mujeres no necesitan cautivar a múltiples machos para garantizar la supervivencia de su descendencia. Por lo tanto, la señalización visual de la fertilidad no es necesaria.
Aunque estas teorías ofrecen posibles explicaciones, el verdadero motivo de esta diferencia entre mujeres y chimpancés sigue siendo un misterio. Lo que sí sabemos es que