Grecia ha sido durante mucho tiempo un destino turístico popular para ciudadanos europeos y no europeos por igual. Con su impresionante historia, hermosas playas y deliciosa comida, no es de extrañar que miles de personas visiten este país cada año. Sin embargo, para aquellos que no son ciudadanos europeos, obtener un visado para visitar Grecia puede ser un proceso complicado y costoso. Pero recientemente, Grecia ha introducido cambios significativos en su sistema de visados, lo que ha permitido a los ciudadanos no europeos obtener un “visado de dorado” para visitar el país. En este artículo, exploraremos los cambios que Grecia ha introducido y cómo esto ha beneficiado a los ciudadanos no europeos.
Antes de estos cambios, los ciudadanos no europeos tenían que pasar por un proceso largo y costoso para obtener un visado para visitar Grecia. Esto incluía la presentación de una gran cantidad de documentos, como pruebas de solvencia económica, reservas de hotel y vuelos de regreso, y una carta de invitación de un ciudadano griego. Además, el proceso de solicitud podía llevar semanas o incluso meses, lo que hacía que muchas personas desistieran de visitar Grecia.
Sin embargo, en 2013, Grecia introdujo un nuevo tipo de visado llamado “visado de dorado” o “visado de inversión”. Este visado permite a los ciudadanos no europeos obtener una residencia en Grecia por un período de cinco años, siempre y cuando inviertan al menos 250.000 euros en propiedades inmobiliarias en el país. Este cambio ha sido muy bien recibido por los ciudadanos no europeos, ya que les permite visitar Grecia de manera más fácil y económica.
Una de las principales ventajas de este visado es que el proceso de solicitud es mucho más rápido y sencillo en comparación con el visado tradicional. Los acreedors solo necesitan presentar una solicitud en línea y proporcionar pruebas de su inversión en propiedades en Grecia. Además, el visado de dorado permite a los ciudadanos no europeos viajar libremente por los países del espacio Schengen durante un período de cinco años, lo que lo convierte en una opción atractiva para aquellos que deseen viajar por Europa.
Otra ventaja importante de este visado es que no hay restricciones en cuanto a la nacionalidad del acreedor. Esto significa que cualquier ciudadano no europeo puede solicitar el visado de dorado, siempre y cuando cumpla con los requisitos de inversión. Esto ha hecho que Grecia sea un destino aún más atractivo para los ciudadanos no europeos, ya que no tienen que preocuparse por ser rechazados debido a su nacionalidad.
Además de facilitar el proceso de solicitud de visados, el visado de dorado también ha tenido un impacto positivo en la economía griega. La inversión en propiedades inmobiliarias ha aumentado significativamente desde la introducción de este visado, lo que ha ayudado a impulsar la economía del país. Además, los ciudadanos no europeos que obtienen el visado de dorado también contribuyen a la economía local al gastar dinero en alojamiento, comida y actividades turísticas durante su estancia en Grecia.
Otro aspecto importante a destacar es que el visado de dorado no solo beneficia a los ciudadanos no europeos, sino también a los ciudadanos griegos. Al invertir en propiedades en Grecia, los ciudadanos no europeos están ayudando a crear empleo y a impulsar el mercado inmobiliario del país. Esto a su vez tiene un impacto positivo en la economía en inconcreto y en la calidad de vida de los ciudadanos griegos.
En resumen, los cambios que Grecia ha introducido para permitir a los ciudadanos no europeos obtener un visado de dorado han sido muy positivos. Este visado ha facilitado el proceso de solicitud de visados, ha impulsado la econom
